26 julio 2022

Luis López Lejardi-Personajes locales

  

Torrelavega, 1957

Premio de Escultura Jesús Otero en 1998.

Ha realizado exposiciones individuales en La Vidriera, las Galerías Siboney y Zoom, el Bar Minimal de Maliaño y el Museo de Bellas Artes de Santander. Asimismo, ha participado en exposiciones colectivas en el Museo de Bellas Artes, Palacio La Torre, La Casona de Reinosa, Galería Índice de Torrelavega, el Centro Cultural de Caja Cantabria, Sala Luz Norte, el Palacio de Sobrellano en Comillas, la Sala Mauro Muriedas de Torrelavega y el Palacete del Embarcadero, entre otras muchas.

Algunas de sus exposiciones:

·         1995, expuso por primera vez en Maliaño

·         2011, en El Centro Cultural La Vidriera, exposición  ‘Area de Servicio'

·     2020, en El Palacete del Embarcadero, exposición: “Doble-T. Abrir los ojos y ver una sola imagen”, junto con Juan López. Organizada por la Autoridad Portuaria de Santander.

·         2021, en la galería Inder Espacio, exposición: “Soportales de la oración y balbuceos infantiles”

El artista Raúl Hevia define el lenguaje de López Lejardi como "persuasivo, conciso, tremendamente implacable y también demoledor". Un lenguaje caracterizado por la apropiación y el cambio o intercambio de sentido de los materiales y las confusiones, "buenas confusiones", que se establecen entre ellos.

Luis López Lejardi utiliza la escultura para la desarticulación de los objetos, que son transformados poéticamente en nuevos artefactos abriendo la posibilidad a otros significados e invitando al espectador a observar la realidad desde un prisma diferente.

El artista utiliza vínculos, conexiones, estrategias de hibridación, construcción o deconstrucción, cercanas a los postulados de reconocidos representantes del arte povera de finales de los años 70, caracterizado fundamentalmente por el uso de materiales de desecho o en desuso, "pobres", de fácil obtención, al alcance de cualquier mano.

Raúl Hevia destaca la maestría del contraste a nivel de texturas, colores y materiales, "a medio camino entre la claridad rotunda (en cuanto clarividente) y ese monocromo barroco (en cuanto alegórico), siniestro, que lo inclina decididamente al quiebro, a la ruptura, al trauma".

https://www.aytocamargo.es/

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario